tag:blogger.com,1999:blog-6538042734922651876.post1913653478567364010..comments2023-12-13T12:23:57.004+01:00Comments on MIS LECTURAS: LOS LIBROS QUE NO ACABAMOSAnonymoushttp://www.blogger.com/profile/15584529377081088901noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-6538042734922651876.post-54394739996526191002010-02-24T23:44:12.153+01:002010-02-24T23:44:12.153+01:00Cuando era joven, mucho más joven, tenía la opinió...Cuando era joven, mucho más joven, tenía la opinión de que ningún libro merecía el que yo lo dejase a medio terminar, al fin y al cabo los libros se hacen para ser leídos, así que me obligaba obstinadamente a acabar todo aquello que caía en mis manos, aunque me resultara totalmente incomprensible, tedioso e incluso frustrante.<br />Con el paso de los años he aprendido a exigirme menos a mí misma y a ser más selectiva con mis lecturas, disfrutando placenteramente de aquellas que me gustan y descartando las que suponen un esfuerzo desmedido. Ya no siento ningún remordimiento por una lectura inacabada, reivindico mi derecho a abandonar un libro en el momento que lo considere oportuno. <br />Existen diferentes y variadas razones para no acabar un libro. Una de las principales a mi parecer es la elección del momento oportuno para iniciar su lectura. Hay veces que el intelecto y el estado anímico no están para ciertas historias, nuestras circunstancias no son las propicias y no estamos en disposición de entender y disfrutar de lo que el escritor quiere contar. Es preferible entonces dejar aparcada la obra en espera de una mejor ocasión.<br />Tengo un par de libros que, por estas razones anteriores, son como dos pequeñas espinitas. El primero es Ulises de James Joyce. Lo tomo, leo, lo dejo, lo retomo y lo vuelvo a relegar, no sé cuando terminaré de leerlo, pero no tengo ninguna prisa, después de todo, los libros no tienen fecha de caducidad. <br />La otra asignatura pendiente es Vida y destino de Vasili Grossman. Hay tal profusión de personajes a los que además se les nombra de mil maneras distintas (por apellidos, diminutivos, apodos familiares, nombres propios…), que se hace imposible seguirles la pista a todos, por lo que en la página cien uno tiene que aceptar sin remisión la idea de no saber quienes son esas personas de las que te están hablando.<br />Así que hay veces que aunque me peleo con el texto y concentro todas mis neuronas en lo allí escrito no pesco nada de nada. Yo los llamo “los infumables”.Saleshttps://www.blogger.com/profile/04629055121427570072noreply@blogger.com