viernes, 6 de noviembre de 2009

LIBRO CLÁSICO VERSUS E-READER

Hace ya algún tiempo que han salido los e-reader, es decir esos aparatos electrónicos en los que se pueden leer una cantidad increible de libros, con un peso mínimo y con poquísimo gasto.  Como ocurre con todas las novedades hay quien los adora y detractores feroces.  Con este comentario me gustaría saber cual es vuestra opinión.  Por mi parte ahí va la mía.  Como lectora impenitente los libros en papel se llevan mi voto sin ninguna duda; me encanta el formato, busco siempre buenas ediciones y no compro libros de bolsillo. Bueno, cuando era más joven yo también pequé (lo reconozco), porque el bolsillo no daba para más.  Organizo en mi biblioteca y releo libros que compré y disfruté hace ya mucho tiempo y a veces entre sus páginas encuentro notas, señalalibros que ya había olvidado y que me hacen recordar buenos y malos momentos.  Por otra parte veo la parte práctica de los e-reader (confieso que poseo uno desde hace poco tiempo).  He perdido la cuenta de la cantidad de libros que tengo descargados. El e-reader pesa poquísimo y en el bolso aunque sea mínimo casi no ocupa lugar.  He podido acceder a libros que por que no me terminan de convencer, no quería comprar (ya que la economía sigue siendo muy importante y más en estos tiempos de crisis) y no podía coger en la biblioteca municipal porque aún no lo tenían.  En el e-reader, llevo un montón de diccionarios, textos legales que me son útiles y apuntes de mis estudios actuales, a parte de un montón de novelas y todo eso en el increible peso de  190 gr.  Las novelas si son clásicos te las puedes bajar gratis y el precio de un libro actual va de los 3 € el más económico a los 6 € el más caro que he encontrado hasta ahora.  Sería una herramienta excelente para nuestros hijos; en vez de ir cargados todos los días al colegio con un montón de libros de textos, llevarlos todos en uno solo.  Como vereis el e-reader también tiene sus ventajas.

1 comentario:

  1. Soy defensora a ultranza de las nuevas tecnologías, pero creo que los libros electrónicos pierden la gracia de un libro en su formato original. Es cierto que ocupan poco espacio y son fáciles de transportar, no así los enormes tochos que me gusta leer, pero el gusto que da pasar una página y sentir el tacto y el olor del papel quedan olvidados en estos equipos electrónicos.
    También es importantee el ahorro económico, descargar un libro cuesta como mucho 6€, frente a los 20€ de media que cuesta un libro en formato tradicional, pero cuando terminas de leerlo y colocas el tomo en la estantería notas su presencia física acompañándote.
    Conclusión, el libro electrónico está muy bien para cuando sales de viaje. Te lo llevas cargadito y a disfrutar leyendo, pero cuando estás en casita con una buena historia entre manos no hay nada mejor que pasar con el dedito hoja tras hoja y sentir su peso entre las manos. Uuummmm !Qué sensación más agradable!
    No obstante !aviso! pienso comprarme uno en cuanto pueda.

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