En los últimos años y coincidiendo con la crisis, bastantes negocios se han visto obligados a cerrar sus puertas. Entre estos negocios se encuentran las librerías, y de ellas las que han sufrido más son las pequeñas librerías . En éste segundo caso además se tiende a echar la culpa al libro electrónico y a las descargas gratuitas. Supongo que entre las razones que han podido provocar estos cierres dado que no se debe al número de lectores, que según parece ha aumentado en los últimos años puede haber mucha diversidad, pero seguro que una sola causa no ha causado esta situación.
Para empezar aún hoy y aunque se hable bastante de él, el libro electrónico no tiene suficiente empuje en España como para ocasionar el cierre de un negocio estable. En segundo lugar aunque es verdad que hay librerías que han tenido que cerrar, también es cierto que otras han aumentado sus negocios e incluso absorbido a otras librerías.
¿No será más bien que todas las actividades comerciales con los años tienen que cambiar su visión del mercado, diversificar, ofrecer cosas nuevas, reinventarse, innovar?
¿No será más bien que todas las actividades comerciales con los años tienen que cambiar su visión del mercado, diversificar, ofrecer cosas nuevas, reinventarse, innovar?
No creo que estos cambios sean iguales para las grandes cadenas que para las pequeñas librerías, pero está claro que cada uno con sus características deberá ser capaz de adaptarse y resultar suficientemente interesante como para no caer en el olvido.
Las grandes librerías, junto con las editoriales ya se están uniendo poco a poco a la venta de libros digitales al mismo tiempo que siguen con la venta de libro en papel, para no perder a los lectores tradicionales ni a los que gustan de las nuevas tecnologías.
Las grandes librerías, junto con las editoriales ya se están uniendo poco a poco a la venta de libros digitales al mismo tiempo que siguen con la venta de libro en papel, para no perder a los lectores tradicionales ni a los que gustan de las nuevas tecnologías.
La pequeña librería no podrá nunca competir con las ventas a precios especiales de las grandes librerías, con sus descuentos fijos y con sus amplia ofertas, entre otras cosas por que no se pueden permitir la compra masiva de un único título aunque sea un best seller, ni la variedad de dichas librerías, pero seguro que pueden ofrecer algo a la que las grandes no pueden acceder, si quieren seguir siendo grandes hipermercados del libro.
Se me ocurre por ejemplo la especialización. Una librería dedicada a la ciencia ficción, a la novela policiaca o a cualquier otro género en el que sean unos verdaderos expertos.
Recuerdo que hace unos años visité en Londres una librería dedicada a la novela negra y era increíble, un sueño para cualquier amante del género. Esa librería tenía un publico fiel y numeroso, que no creo que ni siquiera ahora haya dejado de acudir para ver las últimas novedades y pedir consejo sobre nuevos libros para leer.
El trato personal o el diversificar su oferta dentro de sus posibilidades pueden ser otros puntos de valor para estos negocios. Una librería especializada en novela histórica que además de libros ofrezca artículos de coleccionismo dedicados a ese tema puede ser también muy interesante.
Ideas hay más que personas y solo nos tenemos que poner a ello, y ésta sólo es mi opinión que soy una lectora. Muchas personas tendrán ideas diferentes de como les gustaría que fuera esa librería a la que acudir a buscar sus pequeños tesoros.
Se me ocurre por ejemplo la especialización. Una librería dedicada a la ciencia ficción, a la novela policiaca o a cualquier otro género en el que sean unos verdaderos expertos.
Recuerdo que hace unos años visité en Londres una librería dedicada a la novela negra y era increíble, un sueño para cualquier amante del género. Esa librería tenía un publico fiel y numeroso, que no creo que ni siquiera ahora haya dejado de acudir para ver las últimas novedades y pedir consejo sobre nuevos libros para leer.
El trato personal o el diversificar su oferta dentro de sus posibilidades pueden ser otros puntos de valor para estos negocios. Una librería especializada en novela histórica que además de libros ofrezca artículos de coleccionismo dedicados a ese tema puede ser también muy interesante.
Ideas hay más que personas y solo nos tenemos que poner a ello, y ésta sólo es mi opinión que soy una lectora. Muchas personas tendrán ideas diferentes de como les gustaría que fuera esa librería a la que acudir a buscar sus pequeños tesoros.
Sin estar muy enterada del mercado en general ni del del libro en particular creo que tu razonamiento es totalmente acertado. No creo que por ahora el libro electrónico sea el gran problema, pienso más bien que es por una parte la capacidad de inovación de los negocios lo que marca su futuro, la adaptación a la demanda y a la oferta, como tu has indicado. Por otra parte en España lo que creo que ha dañado mucho a la pequeña librería es la aparición de grandes casas, que imagino absorben a ese gran colectivo que podría denominarse "público genérico" que busca comprar fundamentalmente bestsellers y libros de lectura obligatorios en los diversos niveles educativos. Estas marcas venden tal cantidad de productos que tienen una mayor oferta, más facilidad de realizar pedidos rápidos a las editoriales y suelen ofrecer algun pequeño descuento. Como decía al principio la baza del pequeño es ofrecer algo que le destaque, como por ejemplo el asesoramiento, o la especialización, o actividades complementarias que atraigan a una clientela que pueda hacerse fiel.
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