Henry es bibliotecario y sufre de una extraña afección que le hace viajar en el tiempo. Se traslada al pasado y al futuro de forma involuntaria cuando se encuentra muy estresado o nervioso.
Viajar en el tiempo puede parecer emocionante e interesante, pero si allí donde llegas no sabes cuando ni donde es y además llegas sin nada encima las cosas se pueden volver no sólo difíciles si no también peligrosas.
Me he llevado con este libro en mi lista de próximas lecturas más de dos años y no terminaba de decidirme a leerlo. En primer lugar las historias sobre viajes en el tiempo me fascinan, me parece que es una irrealidad con tantas posibilidades, que permitiría tantas cosas que me encanta cualquier "teoría" sobre el tema. Que incluso a mi me parezca imposible no tiene importancia. En segundo lugar las novelas que ya de entrada parecen totalmente dedicadas al género romántico ya hace tiempo que no me llaman. No me importa que tengan alguna historia de amor, pero cuado sólo se dedican a la búsqueda del amor hace ya un tiempo que se me atragantan. Por eso me ha resultado tan dificil empezar esta historia, por que aunque tenía uno de mis ingredientes preferidos de la literatura fantástica, parecía también tener un exceso de romance que no es bienvenido.
Tengo que decir que me equivoqué estrepitosamente, esta no es una historia de amor aunque el amor tiene una parte importante en esta historia.
La historia me ha parecido interesante e innovadora. Una nueva presentación de los viajes en el tiempo. No es un sueño, no es una suerte. Si quizás puede darte ciertas ventajas, pero es una ventaja mental porque no puedes hacer cambios en aquello que ya ha pasado, así que no tienes mucho que hacer, solo limitarte a sobrevivir a cada viaje y esperar que te desvanecerás pronto. Todos los protagonistas tienen su momento de importancia y de gloria aunque nuestros personajes principales sean tres. La historia avanza y retrocede en el tiempo. Las escenas se repiten desde dos momentos distintos que van hilvanando y estableciendo la historia de principio a fín y dentro de la paradoja que supone el viaje en el tiempo, esta historia es la que más posible parece de todas las que he leido hasta el momento. Con posible no me refiero a la forma en que se explica el viaje en el tiempo, si no más bien a las consecuencias del mismo.
Creo que es un buen libro y no sólo como lectura ligera de verano. Os lo recomiendo.
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