miércoles, 8 de febrero de 2012

TEMBLOR de Rosa Montero


Nos encontramos en un mundo post apocalíptico donde cada nacimiento es un milagro y cada muerte conlleva que un trozo de mundo se desdibuje hasta desaparecer.  La única forma de permanencia es el recuerdo que un grupo de jovenes van dejando de sus "anteriores" en uno de los cristales base de su civilización.  El problema surge cuando cada vez hay menos jóvenes que guarden la memoria de los que se van y las muertes verdaderas empiezan a asolar un mundo que se dirige a su destrucción.
Agua fría es la última adolescente llamada a convertirse en sacerdotísa en el Talapot donde la soledad y una dura formación se convertirán en su día a día hasta que no le queda más remedio que huir en busca de un poco de esperanza.
Éste fué el primer libro que leí de Rosa Montero hace ya veinte años.  El otro día y por casualidad lo volví a ver en la biblioteca y decidí releerlo.  En su momento este libro me había dejado huella.
Aunque este vez la sensación que me produjo el libro no fué el mismo, recobré una vez más ese efecto de inexistencia que me marcó.  El preguntarse: ¿Las cosas realmente existen cuando nadie las mira? ¿Como guardamos en el recuerdo los paisajes, el rostro de las personas si no poseemos una mirada preservativa? ¿Quién nos puede asegurar que al final de nuestra "amplia" visión todo es tal y como lo recordamos? ¿Depende de los ojos con los que se mira el aspecto de todo lo que nos rodea?
Es una novela cuyo único defecto es que se hace corta y entran ganas de profundizar más en alguna de sus vivencias y de sus mensajes.  Mensajes que van mucho más allá de un posible mundo futurista en que unos cuantos poderosos intentan dominar a los demás gracias a la debilidad de la memoria del ser humano y su capacidad de sobrevivir o conformarse según convenga a cada caso.


Rosa Montero nació en Madrid y estudió periodismo y psicología. Colaboró con grupos de teatro independiente, como Canon o Tábano, a la vez que empezaba a publicar en diversos medios informativos (Fotogramas, Pueblo, Posible).
Desde finales de 1976 trabaja de manera exclusiva para el diario El País, en el que fue redactora jefa del suplemento dominical durante 1980-1981.
En 1978 ganó el Premio “Manuel del Arco” de Entrevistas, en 1980 el Premio Nacional de Periodismo para reportajes y artículos literarios y en 2005 el Premio de la Asociación de la Prensa de Madrid a toda una vida profesional.
 Ha publicado las novelas: Crónica del desamor (1979), La función Delta (1981), Te trataré como a una reina (1983), Amado Amo (1988), Temblor (1990), Bella y Oscura (1993), La hija del caníbal ( Premio Primavera de Novela en 1997),  El corazón del Tártaro (2001), La Loca de la casa (2003), Premio Qué Leer 2004 al mejor libro del año, Premio Grinzane Cavour  al mejor libro extranjero publicado en Italia en el 2005 y Premio “Roman Primeur” 2006 (Francia);  Historia del rey transparente (2005), Premio Qué Leer 2005 al mejor libro del año, y Premio Mandarache 2007; Instrucciones para salvar el mundo (2008) y Lágrimas en la lluvia (2011).
También ha publicado el libro de relatos Amantes y enemigos, Premio Círculo de Críticos de Chile 1999,y dos ensayos biográficos, Historias de mujeres y Pasiones, así como cuentos para niños y recopilaciones de entrevistas y artículos.
Su obra está  traducida a más de veinte idiomas y es Doctora Honoris Causa por la Universidad de Puerto Rico.

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